Me llega la prédica
Trabajo cerca de Agustinas con calle San Antonio, pleno centro de Santiago y varias veces al día se para a predicar un tipo de rasta largo como hasta la cintura y realmente me molesta porque grita y grita y varias veces a la semana durante la tarde. De qué vive ese hombre? me creerían que jamás he analizado lo que grita? También se pone un viejo con un pito tipo guachupé y empieza ha pitiar toda la tarde. Súmale el ruido de las micros y la sirena de bomberos qué pasa 1 vez a la semana. Wow esas cosas son parte de mi rutina de trabajo.
Estoy pensando en cambiar las ventanas a termopanel. Saludo a esas personas que trabajan en Santiago Centro.