Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

La cosa está mala!

Soy profesional, titulada hace unos años atrás. Desde el año pasado que trabajo en una oficina privada atendiendo público, la cual presta servicios a una importantísima oficina pública. Todo esto a través de las dichosas licitaciones.
Llegué a trabajar ahí mientras buscaba trabajo en lo mío hace más de un año. El ambiente laboral es bueno y sólo por los colegas aguanto estar ahí. Mi jefe es alcohólico no asumido. Llega muchas veces tarde y pasado a alcohol. Es bien mecha corta, tiene un carácter bien fuerte, con decirles que nos grita y que ni siquiera se le puede hablar, hay que ver si anda de buena o mala para ir a consultarle algo. De esta forma, se ha visto envuelto en muchas discusiones con el público. A nosotros a veces ni siquiera nos deja hablar, porque se enoja y se va. Llega a dar lata ir a preguntarle algo porque nunca se sabe cómo va a reaccionar.

Por otro lado, trabajamos ahí por más de 45 horas semanales por un total de 300 y fracción habiendo vez más pega que hacer. La licitación anterior establece que sólo puedan trabajar ahí gente profesional de ciertas áreas y es por eso que llegué yo. Pero eso sueldo claramente es muy bajo para un profesional. Créanme que buscamos todos los días trabajo en lo nuestro pero no nos sale nada. ¡A veces siento que me voy a pasar la vida ahí haciendo y diciendo lo mismo siempre!

Análogamente a lo anterior, la gente que atendemos como en toda oficina de atención de público es de todos los tipos. Últimamente nos damos cuenta que los usuarios están cada día peor: casi gritan, garabatean, cuestionan, se enojan e incluso increpan si no está listo lo que ellos necesitan. Por más que les expliquemos las cosas nos increpan a nosotros por cosas que dicha oficina pública es responsable y que no cumple. Cada vez la gente está peor. Ven el logo de gobierno y piensan que es oficina pública y que hay que casi correr para tener sus papeles. Varias veces nos ha tocado explicar que no lo somos y así se calman un poco. A veces lo único que queremos es que llegue el viernes para acabar la semana y no volver! ¡Ay qué difícil es atender público!

Para colmo hace unos días fui víctima de hurto de mi celular. Por tratar de ayudar a una usuaria la cabra me roba. ¡Qué impotencia más grande! Me siento aún afectada y expuesta a cualquier cosa.
Sé que esta confesión es fome, no tiene nada del otro mundo, pero me siento tan mal y estancada que necesitaba desahogarme con alguien. El único que siempre me escucha es mi pololo. Me apoya en todo, es un sol y me ayuda en todo.

Hay veces como hoy, en que la pega está tan estresante que sólo anhelo meterme en una piscina y no salir de ahí. Me siento muy desganada. Tengo cero motivación. Por más intento que hago en salir de esa oficina veo cómo mis colegas han encontrado mejores pegas y yo sigo ahí. Busco y busco y nada. Ayer por culpa de problemas de la empresa estuve 12 horas y media del día en la oficina con los colegas. Está la escoba en muchos aspectos y tenemos que quedarnos horas extras para solucionar los cachos que otros no han hecho bien.

Bueno, traté de resumir lo que más pude esta confesión para no latear. Gracias a todos. ¡Ah olvidé decir que por trabajar con estas benditas licitaciones ni siquiera hay derecho a vacaciones! puesto que la empresa para la cual trabajo es nueva, logrando así, que a pesar de llevar más de un año laburando no tengamos derecho a descanso. ¡Por lo cual relajo no sé cuando vaya a tener! Tengo tantas ganas de irme pero mientras no tenga otra cosa no puedo. La cosa está muy mala en todos lados.



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.