Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

'Tengo depresión' fue su carta de presentación.

Hablamos por un tiempo, nos conocimos en persona, pololeamos, vivimos juntos ya después de algunos años de relación y estamos ahorrando para casarnos. La verdad todo bien por el momento, lo pasamos bien, es apañador, nos entendemos en el día a día, yo un tiempo me quedé sin pega pero tenía mi plata guardada más la de él así que nunca nos ha faltado.

Claramente después de tanta maravilla viene un PERO. El pero es que al comienzo de nuestra relación, el primer año él era la inseguridad en persona, me celaba, me trataba pésimo porque creía que me acostaba con mis compañeros del trabajo, que yo iba a la pega a culi*r con todos ellos, en su cabeza hacían de todo conmigo en el trabajo, fue tanto que renuncié y busqué algo que fuers de trato con gente pero en lugares públicos para que él no pensara aberraciones de mi y poder darle seguridad. Cuando le daban estos episodios de querer atentar contra su vida me decía que yo lo usaba, que no valía nada, que yo no me preocupaba por él, que no lo amaba que aquí y que allá, él dudaba tanto tanto de mi que me empecé a cuestionar a mi misma. Pensé que hacía todo mal, que no le demostraba mi afecto, que mi amor no le llegaba. Me iba a buscar a la pega escondido para ver si me pillaba en algo extraño y siempre culpaba a su depresión, me pedía que lo entendiera y blah blah.

Que yo hago las cosas mal, que yo no le gusto que todo es mi culpa, y aunque se que no es así, no he podido superar todo el daño que me hizo de un comienzo. Lo amo como nunca había amado pero siento que me destrozó de una manera terrible. Yo no soy mala novia, no lo veo de esa manera, me he equivocado y estoy consciente de ello, pero todos sus miedos ahora los absorbí yo y ahora que vemos los preparativos para el matrimonio siento un terror en mi alma de que vuelva su depresión.

No es una mala persona pero su mente le juega malas pasadas. Me da tanta tristeza porque ha apostado años de mi vida por él, trabajos, compañeros, tiempo y no he podido sanar, ni todas sus promesas ni palabras de cambio me quitan estas heridas que me provocó. Se que me mandarán a terapia pero no tengo las lucas, además, soy una señora de cuatro décadas (como la canción) y me da miedo quedarme sola. Gracias por leerme y perdón lo extenso.



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.