Cuando crees estar solo

Confieso que hace unas semanas atrás, comencé a trabajar en un centro de rehabilitación de drogas residencial privado, como terapeuta en drogas. Al principio, todo bien, pero no me gustó pasando los días.

El horario laboral empezaba desde las 8:30 de la mañana, hasta las 22:30... pero ella decía que eran nueve horas por tres días y medio. Al contrario, yo prácticamente vivía con ellas (debía quedarme a dormir, desde el lunes a las cinco de la tarde hasta el miercoles a las 10 de la mañana, después debía volver a las 19 hasta el viernes a las 19 de la tarde) y la primera semana, me pagó...mmm, sí, $93.300, sin mencionar que la estadía de las chiquillas mensual, estaba entre los 650-900 mil pesos.

El punto es, que como trabajo con personas adictas quedándome sola con ellas en la noche, a veces debía trabajar más de lo normal, casi 24 horas. Incluso no podía dormir bien y estaba alerta en caso de que ellas tuvieran alguna crisis o si necesitaban alguna cosa.

La primera semana que trabajé con esta señora, estuve siete días sin parar hasta esperar a otra técnico que viniera los fines de semana. Y ahí empezó mi calvario. Como no tenía tanta experiencia, no me daba cuenta que a veces cometía errores y otras hacía las cosas bien.

El punto era que siempre me dejaba como chaleco de mono, así mal. Así que el miércoles de esta semana (2 de Octubre) Me llamó y me dijo 'Ábreme la puerta, estoy aquí ' y yo como ok, fui a abrir la puerta y me encontré con familiares de una usuaria, los cuáles entraron, y trajeron algunas cosas. Luego ella me volvió a llamar y me trató pésimo, con groserías y gritándome, que como podía haberlos dejado entrar, que esto no era un hotel, que ellos no podían pasar sobre mí, etc.

Supuestamente ella misma le dio permiso a ellos para entrar. Ahí exploté totalmente. Hablé con ella a primera hora el miércoles y le expliqué que me quería ir, luego de que terminara mi turno. Se volvió loca. Dijo incluso que no me iba a pagar si yo me iba y no encontraba a alguien que me reemplazara.

No tenía contrato, me pagaba en mano, en efectivo o me depositaba, nada más. Ni boleteando o dando alguna cosa. No tenía como probar que estaba trabajando ahí. Y ayer cuando me fui, comenzó a hostigarme por las redes sociales, etc. En conclusión, no puedo hacer nada más que colocar un reclamo en la inspección del trabajo.

Así que tengan cuidado para los que comenzaron a trabajar desde hace poco, para que no pasen por lo que tuve que pasar yo, y esto sucede en otras partes, no solo en temas de salud mental.

Saludos, que tengan un buen día.