Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

El nidito de la discordia

Entré a trabajar en un centro de distribución en la transnacional del nidito. Era la única administrativa del cd y asistente de gerencia.

Pasaban muchas cosas en el CD. La vieja del aseo era enferma de ordinaria, puteaba a todo el mundo. Un día me garabateó a poto pelao delante de varios compañeros. No le dije nada al principio pero fue demasiado y le tiré el agua de mi vaso en la cara, y le dije que yo no iba a tolerar que me faltara el respeto. La terminaron echando 2 meses después así que todos tuvieron mientras que seguir bancándose a la vieja flayte.

Yo las tenía que hacer todas y tenía buena voluntad disposición, en ese tiempo no habían los servicios de motos qué hay ahora y tenía que salir de la oficina a buscar materiales que a veces se necesitaban, entre muchas cosas que tenía que hacer, que a veces no me daba el tiempo de hacer todo, lo que era malo xq “no cumplía”. Estaba a cargo de una bodeguita que varios tenían llave, por ende guardaban ahí cosas que no debían, otras cosas se perdían, las sacaban, no me avisaban y tampoco tenía estantes para tener todo ordenado. Además en el CD robaban mucho, y los mismos vendedores sabían quienes eran pero a nadie parecía importarle, mientras se llegara a la meta mensual estaba bien.

Empezaron a echar gente como malos de la cabeza y el ambiente general era hostil, a cualquiera le podía tocar PLR a fin de mes y andaban todos asustados, depres, saltones y malas pulgas. Y cuando tocaba, el trato que les daban en recursos inhumanos para despedirlos era horrible, estaba a cargo de una sicóloga mosca muerta con pinta de canuta.

La empresa por otro lado parecía ser que daba oportunidades a sus trabajadores, pero en realidad eso sólo era para los que trabajaban en la oficina central en las condes.

Yo trataba de ser optimista. Trataba directo con la gente de la empresa y siempre los escuchaba y tenía en mi cajón los chocolates del nidito para darles y decirles que las cosas iban a mejorar.

Por ahí me salió un viaje y pedí permiso. Cuando volví del viaje mis compañeros me avisaron que había una tipa nueva instalada en mi puesto. Así que ya sabía para dónde iba ese tren.

Fui a trabajar y cuando llegué la nueva no estaba en mi escritorio, me llamó mi jefe y me dió un discurso mamón y me despidió, luego tuve que pasar a recursos inhumanos a firmar y cuando firmé y me quise despedir de mis compañeros la zorra de la sicóloga me gritó delante de ellos y me dijo que no podía hacer eso, que tenía que bajar y salir de la oficina. Obvio me enojé y le dije con respeto, que solo me estaba despidiendo de mis compañeros y que esa no era la forma de hablarle a nadie. Me acompañó a mi oficina para buscar mis cosas, habían reventado mi cajón con llave y puesto mis cosas en una caja roñosa. La tomé, me acompañó hasta el auto y me fui. Seguramente después de eso me habían bloqueado en la entrada de las bodegas porque eso hacían con todos cuando los botaban, para que no fueran a hacer consultas ni buscar nada.

Salí odiando a la empresa del nidito, mató toda la ilusión de haber entrado en una empresa grande, bonita, “con futuro”(* solo para la oficina central de las condes), pero lamentablemente los centros de distribución son los patios traseros de estas empresas.

Tampoco entiendo cómo pretenden que hagas bien tu trabajo si hay una falta estructural/Organizacional que no te permite cumplir al 100% aunque estés a la altura. Empresas que se llenan la boca con temas como la responsabilidad social, ambiental y bienestar de sus trabajadores pero que permite que recursos inhumanos trate cómo se le de la pinche gana a la gente.

Me fui, con pena, molesta y profundamente decepcionada. A ningún jefe de las condes que me conoció por ser amable y tener buena disposición cuando los tenía que atender y tratar, pude plantearles una visión que les hiciera revisar los procesos que manejaban en el cd.

La empresa del nidito es pura pantalla.



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.