Mucha felicidad
Soy jefe de un área, casado, con hijos. Y en general feliz, me gusta mi pega y como soy medio idealista me las he arreglado para mejorar mi área y la vida de mis subordinados. No tengo quejas, ni peleas, ni cambios de equipo. Mis cabros son piolas y en general yo también.
Hace un par de años conocí a una chiquilla, que trabaja en otro sector pero con la cual tenemos, muy de vez en cuando, cosas que ver en conjunto y es ahí cuando la tranquilidad se me a las pailas. La loca es piola, pocos años más joven que yo, pero todos en nuestra pega saben que es casada y que tiene un hijo al que adora.
Pero no sé hueon, me pongo tiritón cada vez que tengo que tratar con ella, hago tallas hueonas y puta discutir, por que por pega muchas veces nos toca enfrentarnos, respecto de lo que dice su departamento y lo que dice el mío, que ella esta equivocada que yo me equivoco, etc, etc, etc y como que competimos por quién tiene la razón... y como que nos tiarmos palos de quién fue el último que se equivocó y una larga lista de ocasiones en las que me la he querido comer a besos.
Por que en este tiempo las cosas no solo han sido laborales, sino que además hablamos de cosas familiares, antes mucho antes de que yo comenzara a verla con otros ojos, sabía de la enfermedad de mi hijo más chico, y yo de los dramas con el suyo. Cuando estuve a punto de separarme y el drama familiar que ella tuvo con un hermano.
La verdad es que no sé en que momento todo comenzó a cambiar, igual siempre que podíamos hablabamos por que para varias, además somos de gustos iguales.
En fin, sigo enamorado de mi señora, y no tengo intenciones de que eso cambie. Por lo mismo, desde que caché que las cosas comenzaron a cambiar puse la mayor distancia posible entre ambos, porque quise profesional y responsable. No me siento enamorado de ella, aunque a veces la extraño.
Pero sé donde están mis sentimiento.
Aun así es bueno desahogarse un poco.
Que sean felices.