Estoy relajadito...
20 de diciembre y tomé la mejor decisión de mi vida.
Mientras veo en las noticias que los malls están reventados, que hay tacos kilométricos y que la gente se está peleando por el último juguete de moda, yo estoy acá, sentado en la arena, con una cerveza helada y mirando el mar.
Y lo mejor de todo: la playa está vacía. Literalmente tengo kilómetros de costa para mí solo, porque todo el mundo está encerrado comprando regalos.
Es un lujo estar así de tranquilo en estas fechas. Sigan ustedes con el estrés de la Navidad, yo me regalé este día de paz y sol. La mejor inversión.
