Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

El tupper

Tengo 28 años, soy profesional, vivo solo y me pago mis cuentas, pero todavía le tengo terror a mi mamá por una pura cosa: los tuppers.

El fin de semana fui a almorzar a su casa y me pasó las sobras en un pote plástico, de esos viejos que son carne de perro. La cosa es que se me quedó en la oficina un par de días y, cuando lo fui a buscar, ya no estaba. La señora del aseo lo debe haber botado porque, siendo honesto, debía tener vida propia adentro.

Llevo dos días recorriendo los chinos y supermercados buscando uno idéntico para reemplazarlo y que no se dé cuenta. He gastado más en bencina buscando el pote que lo que valía la comida.

Si no encuentro el mismo modelo antes del domingo, voy a tener que inventar que estoy enfermo para no ir a verla. Prefiero mentirle a decirle que le perdí su tupper favorito.



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.