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Buscando en las redes

Hace poco subieron una confesión de una persona que reclamaba porque llamaban a su familia para cobrarle sus deudas.

Saben por qué pasa? Porque suben todo a redes sociales. Y hay personas a las que les pagan por averiguar todo sobre ustedes, deudores inubicables. Esa confesión me desbloqueó un recuerdo; hace como seis años trabajé en una empresa de cobranza que stalkeaba a los deudores. Yo había salido recién de la universidad, pero sin especialidad mi carrera no sirve de nada. Tenía beca para cursar la especialidad pero no cubría la matrícula, así que me di un año para trabajar y juntar dinero para la matrícula y comprarme un PC y otras cosas que necesitaba. Me aceptaron en una empresa de cobranza que trabajaba para un banco muy importante.

Desde el principio todo fue medio trucho porque mi cargo solo decía administrativo, una descripción demasiado general, y el contrato incluía funciones genéricas que no tenían nada que ver con lo que en verdad hacía. Éramos cuatro chicas en ese trabajo que a mí me parecía aburridisimo, todo el día sentada encerrada en un edificio, pero a ellas les encantaba. Era relajado, solo la mitad del mes nos llegaban planillas, la otra mitad del mes nos dedicabamos a ver películas y conversar.

El jefe nos enviaba planillas excel con datos de deudores inubicables y nuestro trabajo era stalkearlos; buscarlos en las redes sociales y encontrar un dato de contacto nuevo: dirección, teléfono, trabajo, familia, etc. Era una búsqueda exhaustiva, hasta en Yapo aparecian, a varios los pillé porque vendían motos o casas y dejaban su número en la publicación. Uno publicó su número de teléfono en un grupo de solteros de facebook, y al llamarlo respondió al tiro. Gracias a LinkedIn sabíamos dónde trabajaban y llamábamos preguntando por ellos. Sin embargo, no podíamos decir el nombre de la empresa de cobranza hasta que habláramos directamente con la persona. Si hablábamos con un tercero, ya sea compañero de trabajo o familiar, le teníamos que decir que llamábamos del banco x, para que, en caso de un reclamo o denuncia, este no le cayera a la empresa de cobranzas, sino al banco, que tiene más dinero para pagar multas. Le dábamos la información nueva a la ejecutiva de cobranzas a cargo de ese cliente en específico, y si la ejecutiva encontraba a la persona y esta pagaba, nos daban un pequeño bono.

Al principio no me di cuenta de que lo que hacíamos en realidad era medio ilegal, pero cuando me dijeron que al llamar no tenía que decir el nombre de la empresa de cobranzas, ahí empecé a sospechar. Solo estuve seis meses ahí, odié ese trabajo porque me aburre estar todo el día sentada y me carga hablar por teléfono. Más encima el jefe nos retaba si encontrábamos pocos datos nuevo , siendo que a veces nos daba ruts de viejitos, que no suben casi nada a redes sociales. Muchas veces venía en la planilla gente fallecida. Hoy en día me acuerdo y me da un poco de vergüenza haber trabajado en un lugar así, molestando a la gente en su trabajo y a su familia. Muchas veces el jefe filtraba mal y nos salía tres meses seguidos la misma persona, y teníamos que estar buscando de nuevo en sus redes sociales si había subido algo interesante. Aburridisimo.

Así que ya saben, si tienen deudas grandes pongan sus redes sociales en privado, pónganse un nombre falso si quieren vender algo, porque hay gente a la que le pagan para que averigüe todo sobre ustedes.



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