Un mejor mundo!
Veo con tristeza cómo la precarización laboral en Chile continúa siendo una realidad. Se suponía que tendríamos más tiempo para compatibilizar nuestros tiempos personales y el trabajo, pero en las ofertas que he visto durante mi búsqueda de empleo he constatado que siguen ofreciendo sueldos de hambre con horarios de 44, distribuidas a modo de esclavitud. El teletrabajo, que nos permitió ahorrar en locomoción y tiempos de viaje durante la pandemia, prácticamente desapareció, lo que demuestra la visión paternalista y controladora a niveles enfermizos de quienes están a cargo de una empresa. Muchas áreas, especialmente en comunicación, marketing, informática, call center, BO, no necesitan estar al cuidado de un 'inspector de patio' para desempeñar bien su trabajo. Somos profesionales. Si no confían en su personal, no lo elijan. Busquen hasta encontrar a personas de su confianza y dénles la laibertad de trabajar desde casa.
En mi área, las comunicaciones, todo es una decepción. Las ofertas complian 4 o 5 carreras (marketing, comunicación, ingeniería comercial, fotografía, audiovisual y diseño) por el sueldo del profesional de una sola (1 millón, por hacer el trabajo que debería realizar un equipo de personas). En uno de mis últimos trabajos formales había orden, un profesional para cada rol, pero el tratp de la dueña dejaba bastante que desear: gritos, sarcasmos, reuniones innecesarias, micromanager, etc. Al final me dijo sin ninguna vergüenza que la agencia pasaba dificultades financieras y que usaría Chat GPT para el contenido escrito (irónico que se promocione como agencia de contenido auténtico, fresco e innovador si usa la IA).
La alta rotación del lugar y respuestas como ésta grafican que aunque se pueda tener un flujo ordenado, con jefes que creen ser patrones de fundo y tener esclavos la cosa no marcha. (Y todo esto por 650 mil, una persona cercana trabaja en transportes y gana por sobre el millón. Claro que con jornadas de 12 horas).
Me da mucha rabia la precarización del trabajo en Chile y creo que es bueno reflexionar en este primero de mayo al respecto. Pensar otras formas de generar ingresos, emprender. No aguantar más sueldos de hambre con horarios de esclavitud, el bajo pago a profesionales, los malos tratos y el trabajo presencial con argumentos tontos como 'para socializar y compartir más, ¡porque queremos conocerte!, trabajo en equipo, tenemos buen ambiente laboral porque nos disfrazamos una vez al año y hacemos fiestas'. Somos adultos, no todos queremos ir a la oficina para conocer gente o hacer payasadas de colegio (ahí se nota cómo nos ven). Queremos hacer nuestro trabajo sin sacrificar nuestra familia, nuestra libertad, nuestra vida.