Reflexionando.
No sé qué pasa conmigo. Espero no ser la única persona que pasa por un periodo complicado y comienza a cuestionarse muchas cosas. Pienso que no sirvo para nada y me siento un fracasado.
Llevo meses buscando trabajo formal sin tener éxito. Me llamaron a una entrevista el otro día y, a pesar de haberlo hecho bien –según yo-, y dejar a todos conformes con mi desempeño, no me llamaron. Anterior a eso participé en un concurso público para un cargo de jefatura. Envié todos los antecedentes, se contactaron conmigo para comunicarme que había sido seleccionado y, de una semana a la otra, declaran el concurso desierto porque las bases habían quedado mal hechas. Una verdadera mala cuea. Y aquí estoy, mientras escribo estas letras para desahogarme, enviando mi enésima postulación de trabajo. Ya me he dado vueltas por todos los portales laborales, y revisado cuanto aviso de trabajo sin tener éxito.
Quiero trabajar con toda la fuerza de mi médula espinal y desarrollarme profesionalmente porque ya me siento mal; me embarga una sensación de vacío tremenda y siento que la depre se está apoderando de mí. Y si no fuera porque hago algunos pitutos no tendría ni para el jabón.
