No solo la plata importa...

Tengo 34 años, soltero sin hijos. He estado muy aburrido y abrumado estos últimos dos años, desde que terminó el encierro pandémico. He tenido mala suerte en el amor, pero buena suerte en lo laboral. Me tocó sufrir por amor ya dos veces, primero por una mujer narcisa y mentirosa que me engañó sin piedad y donde nunca pensé que me harían tanto daño, y luego por otra que me dio un poco de agüita y al ver mi entrega e intensidad, desapareció.

Todos me dicen que merezco a alguien que me quiera de verdad, que me respete y que sea una mina bacán, que soy un tipo guapo e interesante. Sin embargo, al final de cada semana sigo sintiéndome solo y vacío, y sin alguien con quien salir y hacer cosas entretenidas. Tengo dos trabajos, que me consumen bastante tiempo en la semana, además de una banda. Entonces espero con ansias los fines de semana para salir y pasarlo bien, pero termino pasándolo en casa haciendo nada, porque incluso mis amigos ya casi todos tienen pareja o hijos, y ya salen cada vez menos o bien tienen planes con su pareja.

¿De qué sirve sacarse la chucha trabajando y teniendo un buen sueldo a fin de mes, si no se puede aprovechar para pasarlo bien con alguien? Las apps de citas me han aburrido muchísimo también. Las dinámicas de ahí son super aburridas, y siento que al final termina siendo una tómbola. Quizá este pasando por la midlife crisis, o qué sé yo. Espero con ansias que aparezca alguien que me vuelva loco y que reviva ese amor que tengo para dar, y que se interese en mí con intensidad y quizá tener una relación cómplice y sanita.

¿Tan difícil es? .