Admiración por el otro

Acabo de leer la confesión del tipo que está emparejado con una músico y que pedía consejos para que ella dejara de vivir de su sueño y aterrice.

Me puse a pensar en mí. También soy músico, mujer, y cuando estaba en enseñanza media tuve que tomar la dura decisión de si seguir el camino de la música o tomar el rumbo de una carrera convencional.

Pues bien, teniendo muy pocas oportunidades en mi vida, y viendo que tampoco me veía hasta viejita haciendo clases y llendo de concierto en concierto, tomé la segunda opción.
Soy ingeniera, sueldo excelente porque trabajo en minería, 32 años también y afortunadamente amo mi trabajo y me apasiona profundamente.

En cambio, varios de mis amigos y conocidos músicos de mi infancia siguieron su sueño y siguen siendo músicos. Lamentablemente no son brillantes como la chica que menciona él en la confesión y viven con lo justo, pero viven de lo que aman y sueñan. Yo veo desde la vereda de al frente cómo son felices con lo que hacen y los admiro por haber sido valientes y no tomar una 'carrera exitosa', porque siendo inteligentes, su amor por la música fue mayor.

Me dio mucha pena y rabia la situación que el tipo expresó, porque Dios le da sombrero a quien no tiene cabeza... ella tan brillante y él se nota que la envidia lo carcome y que definitivamente no es feliz en lo que hace y quiere arrastrarla a lo mismo.

La vida de un músico promedio no es fácil, pero si vibras cuando tocas en algún concierto, créeme que esa sensación si no la vives, no la entiendes, ni mucho menos entenderás porqué deciden eso para sus vidas.

Siendo ingeniero claro, deberías ganar bien, pero tengo colegas que jamás pudieron ejercer por no encontrar nunca trabajo en lo que estudiaron y trabajan en lo que venga, o como vendedores.

Así que definitivamente el cartón no hace al profesional, y la pasión con la que trabajas define gran parte de tu forma de ser en casa.

Ojalá ese ingeniero 'exitoso' deje volar a esa alma libre que no merece la encierren en una jaula para conteplarla.

Cuando amas a alguien, ámal@ por como es, y no por como quieres que sea. Las personas NO cambian, a no ser que ese cambio lo decidan de manera personal y no por un tercero. Cuando amas a alguien lo entiendes y comprendes que las expectativas son hacerse puro daño y que el amor es también admiración por el otro.