El chicle de la discordia.
Debo confesar que hace algunos años atrás... (Cómo 10 o más jajaja) venía devuelta de mi trabajo, un viaje en micro de hora y media, con mis audífonos puestos escuchando mi viejo pendrive con mi mejor selección de música. Sentada hasta la última fila iba mascando mi ya muy gastado chicle, haciendo bombitas tronadoras, me encanta el sonido que hace al explotar, de pronto siento que me dan un empujoncito a mi lado, pero sin decirme nada, así que seguí en la mía, haciendo sonar mi amado chicle, y baje el volumen a mi musiquita.
Cada que hacía sonar el famoso chicle, el hombre a mi lado se ofuscaba un poco más, mascullando alguna queja, y ya luego una que otra grosería, yo me hacía la loca no mas y ahí iba nuevamente con mi tronador chicle, jaja.
Si, esa es mi confesión, un día después de un largo día de trabajo pasteleando, hice sufrir x un rato a un viajante a mi lado.
Todavía me río jajajaja
Arena ven a miiiiiiii
