Estoy chato!

He tenido un año de mierda y sumamente complejo. Después de años de sacrificio y de trabajar en el norte, logré un bienestar económico que me ha permitido muchas cosas, eso si, sin excederme ni confiarme. Producto de esto y de que soy noble, sobretodo con quienes quiero, ayudé a mis viejos, hermanos, inclusive algunos amigos (economicamente).

Al regresar a Santiago, 'todo se derrumbó', como dice Emannuel. Descubrí que mis viejos habian reventado una cuenta corriente y tarjetas de crédito en el Monticello, la caga mas uno en el SII (porque si, tb pase mi nombre para que salieran delante con su negocio), mis hermanos me dieron la espalda y a la medida que pasaba el tiempo iban desapareciendo los amigos a los que tanto quise...

Tengo un excelente trabajo y hago lo que me gusta, no pude llegar a mejor lugar, pese a los ataos económicos me mantenía firme y con fuerza. Mi relación amorosa iba bien y se proyectaba la raja, pero al tiempo, me diagnostican una enfermedad, de esas raras, a los huesos... sin cobertura GES y mil problemas para obtener los medicamentos (isapre). Fue tan complejo el caso que tuve que suspender actividad física, ir de doctor en doctor buscando respuesta y una licencia que ya llevaba meses en evaluación. Dejé de ir a la pega y las licencias médicas se mantenían... las rechazaban, reducían, y así... ha sido la historia hasta el día de hoy.

De paso terminé con mi pareja, quien ya no soportaba mi enfermedad. Amaba mi pega, mas que a todo lo que tenía! y creo que sufrí un duelo, por saber como la iba perdiendo...al paso del tiempo me reemplazaron y ya nadie mas me recordó.

Al año de todo esta crisis financiera, que trajo consigo el fin de la relación con mis viejos, distanciamiento de mis hermanos y de algunos amigos que simplemente no quisieron saber de una persona enferma (inclusive mi ex pareja), recién me vine a pegar el alcachofazo que todo tiene su tiempo y sus limites: la pega, el amor, la familia... la entrega es necesaria, pero primero esta uno. Cuando mucho se entrega, mucho se arriesga. Sigo luchando con la isapre, los hospitales, sii, créditos impagos, el extrañar mi pega ( de la que seguramente me despedirán en cuanto vuelva...eso ya lo sé), etc... pero con otra convicción.