El dilema
Estoy en un dilema, amigos. Hoy estaba sentado en un local tomando un café tranquilamente mientras esperaba, y por casualidad escuché una conversación entre dos mujeres mayores de unos 30 años. Una de ellas había descubierto recientemente que su pareja la había engañado durante varios años con la madre de su hijo. La mujer estaba muy enojada y desilusionada, y se preguntaba cómo los hombres podían ser tan crueles e insensibles. El hombre incluso la amenazó con llamar a la policía si ella no se iba y le ofreció dinero para que se quedara callada, y terminó culpándola a ella si su familia se desmoronaba por contar la verdad. Es triste que en Chile haya hombres así, que nieguen todo y probablemente le hayan contado a su esposa otra historia, y ella lo haya perdonado.
La otra mujer le sugirió que se vengara de varias maneras, como difundir su historia en las redes sociales, subir fotos, acusarlo de consumo de drogas en el trabajo, enviar los resultados de los exámenes a su esposa, denunciarlo, etc. Pero la mujer simplemente la escuchaba, no estaba segura de qué hacer. Al final, la mujer afectada contó todo a la madre del niño, pero no pudo demostrarlo y estaba frustrada de que la esposa no la hubiera buscado para confirmar la verdad y enfrentar al hombre.
Como hombre, entiendo la desconfianza de muchas mujeres hacia los hombres debido a las acciones de hombres como él. Como padre, si alguien le hiciera algo así a mi hija, lo buscaría y le daría un golpe. Me sentí impotente y con ganas de hacer algo para ayudar a la mujer afectada. Pero por ahora solo sé dónde trabaja el hombre, gracias a mi red de contactos en el área.
Mi consejo para todos es que usen condones y sean claros con sus parejas. Dejen de dañar el género femenino. En cuanto a si deberíamos divulgar la información en el trabajo del hombre, aún lo estamos discutiendo con mi esposa. ¿Se lo merece o no? No estoy seguro
