Saliendo del closet

Había una vez un calabacín llamado Zucchini, que crecía felizmente en un huerto junto a otros vegetales. Sin embargo, Zucchini siempre se sentía triste porque a pesar de que sabía que era una fruta, todo el mundo lo consideraba una verdura.

Un día, Zucchini decidió que no podía seguir viviendo así. Se puso en marcha y comenzó a hablar con otros frutos y verduras para tratar de convencerlos de que él era una fruta. Pero todos le decían lo mismo: 'Eres verde y alargado, tienes un sabor suave y eres un vegetal'.

Zucchini se sintió aún más triste y solo. Entonces, decidió buscar ayuda de un sabio árbol de manzanas que estaba en el huerto. El árbol de manzanas escuchó la historia de Zucchini y le dijo: 'No te preocupes, Zucchini, eres una fruta porque contienes semillas en tu interior, lo que te hace botánicamente una fruta. No importa lo que digan los demás, lo importante es lo que tú sabes que eres'.

Zucchini se sintió aliviado al escuchar estas palabras sabias. Se dio cuenta de que no importaba lo que los demás pensaran, lo importante era aceptarse a sí mismo y saber quién era. Desde ese día en adelante, Zucchini vivió feliz sabiendo que era una fruta y sintiendo orgullo de ello. Y aunque algunos lo seguían considerando como una verdura, Zucchini se sentía seguro y feliz sabiendo la verdad.