Nunca hay que perder la fe
Esta confesión es para los que estan desmotivados y frustados en su trabajo solo les puedo decir nunca pierdan la fé...
Trabajo desde que sali del colegio, con mucho mucho esfuerzo saque mi carrera profesional, de una carrera ultra colapsada...
Comencé a trabajar en el área antes de titularme porque hice una práctica muy buena. Al principio todo era color de rosa... hasta que llego la bendita pandemia, me redujeron el sueldo, después me lo suspendieron y cuando volvimos a la normalidad me di cuenta que fui la única a quien lo hicieron en la empresa, pasaban cosas importantes y graves y la ultima en enterarme era yo, cuando había que quedarse hasta mas tarde mi jefe decia: 'Que se quede ella, total no tiene hijos y no tiene nada que hacer en su casa' y asi varias cosas mas que detonaron en un transtorno ansioso, sumandole que la carga laboral despues fue brutal.
Pensaba todos los dias en que hacer y que no perjudicará mi futuro laboral, en no quedar mal porque mi ex jefe pelaba a todos los que se iban y los desprestigiaba con medio mundo para que no te propusieran para otros trabajos aunque sabia que el trabajo de los demás era brillante.
Me dieron crisis de pánico, tuve que medicarme por varios meses sin que ellos supieran porque todo lo criticaban y ponian en duda... hasta que ya no aguante más y detonó en una gastropatia aguda, me dieron licencia por 2 semanas porque no mejoraba y se mueren todo lo que hablaron, dijeron que era floja, que me estaba haciendo, que mi licencia era falsa, etc.
Hasta que un día me arme me valor, deje de querer pensar en el que dirán y me valore como persona... Quise negociar pero me tuvieron semanas esperando una respuesta, al final tomé la decisión de renunciar y salir de toda esa toxicidad.
A pesar de todo lo vivido siempre senti gratitud hacia la empresa por haberme dado la oportunidad de trabajar sin título y poder tener un poco mas de experiencia laboral y era uno de los motivos tambien por lo cuales no lo hice antes.
Cuando lo hice sentí un alivio gigante, porfin pude dormir en paz.
Sabía que se venia difícil pero me enfrente a todo el miedo que tuve. Al tiempo conseguí un trabajo a honorarios, bien pagado, tenia tiempo libre, estaba en mi casita en las tardes, etc.
Este trabajo me llevo a donde estoy ahora y es todo lo que siempre quise cuando estaba en la U y pensaba en que hacer cuando me titulara.
Solo puedo decir que después de la tormenta siempre sale el sol, que aveces vale la pena arriesgarse, sentir miedo y atreverse a hacer cambios, porque todo sirve para aprender. En mi caso a valorarme, a validarme y a no sentir nunca mas que alguien porque es tu 'jefe' va a tener mas derechos que tu como ser humano, a nunca más exponer mi salud mental y fisica por un trabajo.
Hoy me siento muy feliz y afortunada de que todo el esfuerzo que puse desde el comienzo este dando sus frutos.
Todo llega en el momento preciso! Solo hay que ser paciente y como dije al comienzo NUNCA HAY QUE PERDER LA FÉ!!
