El terapeuta

Hola, soy la chica 'enganchah' de su psicólogo de la confesión #27702.

Y les vengo a plantear otra interrogante: Que tan mal tenemos que estar para que ambos (psicólogo y paciente) nos envolvamos en una aventura?

Porque si, pasó chicos! jajaj.

Para todos los que me aconsejaron en los comentarios de que era un amor de transferencia y que debía expresarle mis sentimientos 'patológicos' para continuar sanamente con mi proceso terapéutico... Lo hice poh!

Y hubo un silencio más incómodo que la cresta, no supo que decirme. Sólo su cara se ruborizó y se puso muy incómodo.

A pesar de esto, seguí con el tratamiento. Sentí que él me podía ayudar con esto, pero en las siguientes sesiones entre nosotros había una tensión sexual que se percibía en el aire, pensé que era idea mía. Hasta que un día al despedirnos no aguantamos más y nos besamos como sedientos el uno del otro.

Sentía que no era correcto, pero estábamos tan fogosos que no aguantamos e hicimos el amor sobre el escritorio de su consulta. Me confesó que le ocurría lo mismo, pero no debía ni era capaz de expresar nada por ética profesional. Pero se fue todo a la verga jajaja y hoy en día estamos saliendo.

Esto es lo más adrenalinico que he hecho en mi vida (y también lo más friki). Creo que terminaré mi tratamiento con una mujer.