Las palabras hieren

Leí la confesión de la amiga 28046~ SIEMPRE DESEPCIONAN. Y debo decirle que lo mejor que puede hacer es tomar el consejo de su pareja...

Llevo más de veinte años con mi pareja y cinco de casados...muchas Navidades!! Al comienzo de nuestra relación estas fiestas de fin de año siempre eran con su familia, mi marido siempre preocupado de hacerles buenos regalos a cada uno de ellos dentro del presupuesto que tenía y yo también les hacía regalos a cada uno de ellos...cuando comenzaba la apertura de estos el papá comenzaba con sus comentarios ahí en el mismo momento: - ¡Mmm no había otro color! ¡Donde lo compraste, tení la boleta?? ¡No había otra cosa! Etc. Etc.

Quedé horrorizada considerando que eran buenos regalos. Esta conducta se repitió Navidad tras Navidad hasta que le dije a mi marido ya basta!!! Basta de soportar sus comentarios es un mal agradecido como si él hiciera regalos increíbles...

Ver a mi marido destruído me partía el corazón.

Yo por mi parte juré nunca más hacerles regalos a ninguno, suegro, suegra y cuñados todos cortados con la misma tijera...y mis Navidades con ellos fueron mejorando ya no tenía que soportar sus malos comentarios...mi marido igual fue avanzando en esta situación, ya no pasábamos las Navidades con ellos sólo mi marido el día 24 les llevaba algunos presentes durante el día así comenzó el 'Distanciamiento'

Hoy y ya hace 5 añitos la Navidad es en nuestra casita con nuestros 3 hijos y nuestro perrito(al que no podíamos llevar porque le molestaba) Con la mano en el corazón les puedo decir que hace 5 años nuestras Navidades son divertidas, nos reímos, nos emocionamos, aplaudimos y lo más importante veo a mi marido pleno y feliz.
Amo mi familia!!!

Y luego hay padres que preguntan a sus hijos que por qué se alejan.

Lejos la mejor decisión, ni siquiera mis hijos extrañan ir donde los abuelos paternos...se lo perdieron, se farrearon a un hijo que daba todo por ellos, ustedes pueden decir, pero cómo? Quizás no era para tanto?

Pero no señores las palabras hieren y duelen más que un golpe y mi marido resultó ser el más golpeado...hoy estoy feliz porque cada Navidad que pasa lejos de ellos es remedio para su alma y se nota.