El qué dirán

En mi trabajo llegó un jefazo: soltero, simpático, buen mozo, colaborador y galán. A mí me encantó y también le gusté a él. Nos vemos fuera del horario laboral todos los días y los fines de semana también, nos encantamos, incluso me pidió pololeo y fue a mi casa a conocer a mi familia y pronto viajaremos a la ciudad donde vive su mamá para presentarme. Por primera vez me siento enamorada y creo que soy correspondida.

¿Lo malo? Tengo un tremendo susto de los malos comentarios, cahuineo y el conventilleo acá en el trabajo por razones obvias.

Las señoras de acá ya andan «comentando» tonteras desagradables.
El es super cariñoso, al principio pasaba por mi escritorio y me dejaba algún chocolate o simplemente me iba a decir que me veo linda o que se alegra mucho de que esté allí y me plantaba un beso siempre. Así a vista y paciencia de las demás colegas. Yo igual traté siempre de bajarle el perfil porque son muy cahuineras acá.

Ahora ya no hace eso, porque le dije a mi crush que nos veamos en otro horario y en el trabajo solamente trabajemos. Él no está de acuerdo porque dice que no estamos haciendo nada malo, pero que aún así va a hacer lo que le pida porque me ama.

Asi que ahora solo pasa temprano en la mañana y para irnos me espera afuerita cariñoso como siempre, y eso es todo, para evitar dar material para comentarios y así yo esté más tranquila.

Yo veo que tenemos algo lindo que su cariño es genuino, que me entendió en mi punto y me apoya, y al igual que yo él quiere algo más serio, pero tengo susto de estas víboras del escritorio del frente...

No quiero ser el tema de conversación en el horario de colación, o tema para bromas pesadas y cahuineo en general, pero tampoco quiero dejar pasar la oportunidad de experimentar el amor verdadero por primera vez.

Las y los que tengan más experiencia o que en algún momento pasaron por algo así, denme un consejito para equilibrar la cosa, a mis 23 aún tengo mucho que aprender y agradezco su experiencia.

Desde ya muchas gracias.