Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

Están en todas partes

Hace muchos años trabajé en un local de comida rápida, éramos casi todos muy jóvenes, yo tenía 19 años en ese entonces, pero tenía muchos compañeros y compañeras desde los 16 años (todos con autorización de sus papás). Los mayores eran los gerentes restorant o swing que en ese entonces era una clasificación entre quienes estaban a cargo tuyo.

Los carretes eran una constante y había días en que pasábamos de largo, no debo mentir que era entretenida esa época y que a pesar de lo poco que nos pagaban siempre había alguna manera de salir a carretear.

Uno de los gerentes, que debe haber tenido cerca de 30 en ese entonces se empezó a hacer muy amigo mío, me apañaba en cosas que pasaban, me acompañaba al colectivo y siempre estaba muy atento a cualquier cosa que necesitase... la verdad es que siempre lo vi como un buen amigo y que era demasiado buena onda conmigo, cosa que no me sorprendía porque no trataba de jotearme ni de engrupirme, así que piola... era un buen compañero y además un buen amigo... 'ideal' hasta que...

En un carrete, quedábamos muy pocas personas y yo ya me quería ir a acostar porque estaba cansada... recuerdo que me dijo 'pero por qué no te quedai para el último copete?' y mi peor decisión fue decirle que sí y tomarme aquel copete... se me apagó la tele y no recordé hasta el otro día en la mañana que aparecí muy adolorida, desvestida desde la cintura para abajo y sin poder recordar lo que pasaba...

de ahí en adelante viví una pesadilla... entre lo que trataba de recordar... algunos pantallazos había en mi cabeza, pero era tan raro... cómo 'él' me iba a hacer algo así... si éramos 'amigos'... Pero mis dudas se aclararon cuando me lo encontré en el turno siguiente y me dice 'que bién lo pasamos anoche, cierto?', de ahí en adelante el tipo cambió su actitud conmigo, yo estaba tan confundida, no recordaba nada más que pantallazos, él empezó a decirme que lo habíamos pasado muy bien, que él lo había estado esperando hace mucho tiempo. Yo le dije que no me acordaba de nada y le pregunté que qué me había puesto en el copete, me reconoció que había puesto algo, pero que era para que lo pasáramos bien. Me sentía mal... culpable por haberme tomado el copete...

le conté a una amiga del trabajo y me acompañó a los pacos, pero no sirvió de nada, en esos años (hablo de hace casi 20 años atrás) los pacos me dijeron que si no tenía pruebas no tenía para qué denunciar.

el calvario siguió cuando al pasar los días no me llegó la menstruación y el tipo me presionaba que si estaba embarazada él no se haría cargo y que tenía que abortar, me trajo no se qué tantas cosas para que tomara... pero yo sentía que me moría en vida...
le conté a mi pololo de ese entonces lo que me había pasado, pero nunca le dije quién había sido el miserable... él me apoyó diciéndome que si estaba embarazada él podía ser el papá del bebé.

Fui a un gine, a quien le conté todo lo que me había pasado y después de una exploración intensa por mi útero, llegué a casa y sangré con dolores intensos por un par de días, mientras lloraba y le pedía a mi mamá que no me dejara sola, quizás era mi forma de desahogar con mi mamá lo que ella no sabía que me pasaba...

Aprendí a ser desconfiada hasta de mi propia sombra... y de verdad espero que esto nunca le pase a nadie...

Cuídense... que hay psicópatas en cualquier parte...



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.