Durante mi primer trabajo como sufri acoso laboral, sé que quizás es algo común, pero no recuerdo haberme sentido tan humillado en mi vida. Ambas, jefa utp y directora, cuestionaban cada cosa que hacía, nada les parecía bien. Al inicio de mi segundo año, aprovechando que no había nadie en la sala de profesores, me amenazaron con despedirme sin no cumplía con sus expectativas durante los 3 primeros meses del año.
Hasta ahí nada con lo que no pudiera lidiar, hasta que meses más tarde, fueron a ver una clase sin avisarme (según el protocolo siempre debía avisarse con una semana de anticipación), ese día debía tomarles una prueba a los niños y extrañamente las pruebas desaparecieron de mi escritorio, las había impreso a las 8:00 am para ganar tiempo, pero no estaban por ningún lado.
Aunque lo que más me preocupaba eran sus caras de molestia y desaprobación al no poder encontrar las pruebas. A los días me llaman a la oficina, ambas esperándome, me gritaron como si tuviera 12 años y fuera un alumno más, ya que según ellas era mi responsabilidad la extravío de las pruebas y no algo propio de un 'hombre adulto', además de seguir criticando mi trabajo como de costumbre.
Curiosamente la directora me informa que sí hallaron las pruebas, entonces pregunto 'dónde las hallaron?', y entre nervios sólo me respondió 'bueno, por ahí...'. Está más que claro fueron ellas, sólo que me cuesta comprender el nivel de maldad para hacer algo así. Terminé retirándome de ese trabajo, mi salud mental estaba por el suelo, colapsado, pisoteado y ya sin confianza en mi mismo, sin ganas de volver a ejercer nunca más.
Lo más triste es que esto seguirá pasando y lo peor es que está normalizado, porque 'bucha, así es la pega nomás'. Sólo puedo decir, que ningún sueldo vale más que la salud y el bienestar de cada uno.
