Sepan las consecuencias
Empaticé tanto con la confesión de la chica que describió como afecta la infidelidad en los hijos que tengo que escribir esto. Esto es para que lo piensen bien antes de ser infiel si tienes familia.
Me remontaré a mis quince años, adolescente, edad complicada. Mi familia era perfecta, mamá, papá, hermano, una familia amorosa, ambos trabajaban hasta que por decisiones de mis papás mi mamá pudo darse el lujo de dejar de trabajar para estudiar. Poco a poco los problemas económicos comenzaron a apremiar, su relación se volvió pésima, ví como poco a poco comenzó a crecer un desprecio y dolor entre ellos, llegando a la violencia. Aún recuerdo cuando en una pelea mi papá le tiró una patada por detrás a mi mamá con tanta furia en el rostro que por suerte no le llegó y solo quedó en el aire. Esa cara jamás la olvidaré.
Una noche mis papás se demoraron mucho en llegar a la casa y con mi hermano nos comenzamos a preocupar, era muy raro que eso pasara. Hasta que de pronto, entra mi mamá llorando desesperada de un solo portazo a la casa y nosotros espantados. Al poco rato entra mi papá quien pasa directamente al patio sin decir ni una palabra. Quedó la cagada...
Entre lágrimas mi madre nos confiesa que venían de la consulta médica y la doctora los hace pasar a ambos ya que debía realizar una pregunta muy seria y complicada. Les contó que mi mamá tenía una enfermedad de transmisión sexual y en medio de la consulta mi papá tuvo que confesar a la doctora que le fue infiel a mi mamá. No me imagino el tremendo autocontrol que debió haber tenido mi mamá para no hacer un escándalo en la consulta. Jamás había visto a mi mamá tan destrozada...nunca. Esa pequeña escena de 5 minutos jamás se ha borrado de mi mente y nunca lo hará. Poco sabía ella lo que se venía.
El muy tonto se revolcaba con su amante en el horario de almuerzo en su oficina y en moteles del centro. La tipa le contagió la enfermedad. Un día lo encaré y le pregunté si era verdad que le había sido infiel a mi mamá y frente a ella le dijo: 'Te juro por los niños que no te engañé'. Teníamos las pruebas médicas y el muy cobarde prefirió jurar por mí Y EN MI CARA que algún error debió haber, parece que el llevó a un nuevo nivel el miente miente aunque te estén pillando.
Yo aún era chica y estaba en un colegio que quedaba muy lejos de mi casa, por lo que debía seguir yéndome con el en las mañanas para que no me pasara nada. No pude cruzar con él ninguna palabra durante tres meses y me dolía el corazón tener que seguir viéndole su cara todos los días, quería que se fuera de la casa. De extrovertida y llena de energía, me convertí en una chica callada, distraída e introvertida, al llegar a casa vivía un infierno en la tierra y no era un problema que pudiera conversar en confianza con alguna amiga. Ahora luego de años entendí que tuve depresión y desarrollé durante ese tiempo trastorno obsesivo compulsivo que no me dejaba dormir. Todo por el estrés, violencia e incertidumbre. Que decir de mi hermano, hasta hoy no he hablado con él sobre ese periodo por lo que no sé en que medida le afectó. Ambos decidimos dejar ese año como un periodo oscuro.
Pasó poco tiempo y mi mamá se entera que está embarazada, toda la familia se enteró de la infidelidad y del embarazo por lo que no lo vieron con buenos ojos, sin embargo mi mamá decidió perdonarlo porque dependía de él y creía que su infidelidad había sido una sola vez y el nuevo bebé le dió un poco de distracción y una nueva ilusión. Hasta que una noche comenzó con un aborto espontáneo, mi papá desesperado la llevó de madrugada y fue testigo de su aborto. Realizados los análisis se concluye que la enfermedad transmitida por mi papá fue lo que mató a mi futuro hermanito (era niño).
Debo decir que el aborto espontáneo no conmovió en nada a mi padre. Jamás lo escuché pedir perdón. El odio que creció dentro de nosotros hacía él fue creciendo, no solo había tenido el descaro de engañar a mi mamá si no que había sido el culpable de su pérdida. Llegó a decir que su infidelidad había sido su culpa, por ser mala esposa y jamás se hizo cargo de su responsabilidad en la situación, habían noches en que yo despertaba por lo llantos explosivos de mi mamá. Le pedí que por favor lo dejara, que era mejor tener padres separados que vivir en esa situación, sin embargo la presión familiar y la dependencia de mi mamá eran más grandes. Mi papá era de esos que son héroes, del que cuando eres niña dices que quieres un hombre igual a tu papá porque él es lo máximo, luego de esto, se cae la imagen que tienes de él como padre y de los hombres en general. Una noche le pregunté si él se daba cuenta de cómo me iba a afectar lo que él había hecho en las relaciones de pareja futuras que yo tendría. Por supuesto no se daba cuenta, para el eran cosas que no tienen nada que ver.
Hoy que tengo 30 jamás pude reparar la imagen de cobarde y egoísta de mi papá y débil de mi mamá quien yo creía era una mujer llena de vida hasta que esto sucedió. Yo los amo, son mis padres y son humanos que cometen errores, por lo que con el tiempo he logrado 'entender' sus circunstancias, pero es una herida de esas que se te vienen a la cabeza cada cierto tiempo. Ellos siguen juntos, mi padre intentó remediar su error trabajando duro para intentar enmendar sus culpas con estabilidad económica pero es un hombre frustrado, que solo trabaja, nada amoroso, y molesto con su vida y con nosotros sus hijos ya que no olvidamos. Mi madre se convirtió en una mujer celosa, controladora y dependiente emocional que todos los días desea dejarlo porque ya no confía en él, pero a estas alturas de la vida ninguno quiere comenzar de nuevo. Me da pena ver cómo están con alguien que hace años dejaron de amar pero están juntos solo por estar...es ver cómo se apagan.
Cuento esto para sanar y sobre todo para que se den cuenta de que mientras ustedes cómo pareja se convierten en un infierno tras descubrir una infidelidad, no se dan cuentan de que también queman a sus hijos...y créanme, no se dan cuenta. Y por último decir que mis padres tienen sus días buenos pero siempre, siempre un pequeño gesto o acto que despierte la desconfianza vuelve a abrir la herida, llevan años así y el ciclo es el mismo. Una infidelidad destruye una pareja y si no lo hace, si la imagen que tendran tus hijos sobre ti, cada reto, cada consejo por parte de él no tenía peso, ¿Con qué moral?. Nunca saldrá de sus cabezas que eres el papá que engañaba a su mamá, en eso te convertirás.