Soy el hombre monoooooo

Hace muchos años, cuando era muy joven y estaba incursionando en las primeras pegas de mi vida fui con una pareja que tenía en ese tiempo a inscribirme a una pequeña empresa prestadora de servicios agroindustriales. Tenían una oficina re chica y sólo atendía la secretaria y el gerente en el lugar. Para la inscripción era necesario un papel que no recuerdo el nombre pero que había que ir a pedirlo a la famosa OMIL de la municipalidad local.

Al llegar a la OMIL nos atendió una galla que sabía bien lo que necesitábamos, pero nos solicitó un comprobante de domicilio 'una boleta de luz o de agua les puede servir' nos dijo. Conseguimos una y a la hora volvimos y la tipa nos dijo 'ya pero ahora no los puedo atender', siendo que aún era horario de atención.

Al otro día volvimos y en el mismo puesto había otra galla diferente con cara de amargada que no tenía idea de nuestro trámite, entro mi ex polola primero con una amiga suya y salieron bien ofuscadas, algo desagradable les dijeron al parecer. Le pregunté a mi ex que pasó y antipáticamente me dice 'entra voh y pregunta voh mismo'.

Aweonadamente le hice caso entro y la galla desconocida al explicarle lo del papel que necesitábamos me quedó mirando como si le hablara en chino, y en eso aparece una vieja agria más amargada que la otra, jefa de local parece, y dice 'nosotros solo atendemos a los que tengan el carnet OMIL no perderemos el tiempo atendiendo a nadie que no lo tenga' y no me pescaron más, y toda la gente mirando. La vergüenzita.
Fuimos a la oficina de la empresa a contar la situación y la secretaria nos dijo 'vinieron hartas personas contando que les dieron el mismo trato en la OMIL. Ya no importa, inscríbanse con el puro carnet no más'.

Pffff burocracia tonta e imposible por una pega de mierda.
La famosita oficina de intermediación laboral poniéndose la camiseta por los trabajadores de Chile, debí haberles echado sus chuchadas a las viejas culecas.