Cuando quise iniciar mi negocio, la Municipalidad me tramitó 6 meses el permiso,
el SII calculó los ingresos que podría percibir y me cobró 700.000 por adelantado.
Y pagué casi 80.000 pesos por la patente.
Es decir casi 1.000.000 de pesos antes de poder empezar a trabajar y por suerte me llegaron clientes, sino habría quebrado.
Luego un gran supermercado puso una sucursal cerca de mi local, la patente la recibió en una hora, le cobraron sólo 1.000 pesos y el SII, al ver que una de las sucursales del supermercado registraba pérdidas de dinero, no le cobró impuestos pese a que en las otras sedes ganaba mucho dinero, lo que compensaba la pérdida.
Así que cuando el funcionario municipal vino a regalarme un basurero con ruedas, le dije que se lo llevara porque no me servía, y que me parecía un chiste lo que me cobraron a mí comparado con lo que le cobraron a ese supermercado.
El funcionario agachó la cabeza y se fue sin decirme nada porque sabía que la había embarrado.