Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

Efectos secundarios

Tengo 27 años y a fines del año pasado le estuve ayudando a una tía a pintar unos letreros y con ese simple hecho me metí en un mundo que no conocía. Resulta que comenzó a gustarme mucho el olor del aguarrás, diluyente y similares, al punto de tener la necesidad de oler las botellas varias veces al día.
Pronto comencé a ampliar mis gustos, más encima mi papá tiene un taller mecánico con neopren, parafina, bencina y demases (ustedes comprenderán el olor, es bien conocido y creo que a varios les gusta).

Comencé a comprar distintos tipos de inhalantes, desde quita esmaltes hasta aguarrás, neopren, ceras de piso, pasta de zapatos etc y el problema es que ahora trabajo en una ferretería donde venden varios de estos líquidos a granel. Si de mi dependiera pasaría todo el día con la cabeza metida en los tambores, pero me tengo que aguantar. Además por salud, porque comencé con disnea y se me apura la cuchara.
No puedo dejar el trabajo obviamente, así que tendré que aprender a controlar mi desconocida adicción.
Pd, en esta historia no hay sexo ni infidelidades.



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.