Nunca importan las cosas importantes
Quiero compartir una fea experiencia de frustración y desilusión que tuve trabajando como técnico en enfermería a cargo de 1 pabellón de pacientes y cuidadoras en una reconocida institución sin fines de lucro para personas con problemas psicomotores graves, retrasos y diversas patologías mentales. Alcancé a estar ahí 2 meses.
Una mañana escuché que uno de ellos se quejaba mucho, balbuceaba y me mostraba su cuerpo, al revisar tenía contusiones y pensé que pudo ser porque a veces andan en el suelo o se pelean entre ellos y hay que separarlos.
A los 2 días aproximadamente, lo escuché llorar en su pieza, me acerco despacio y veo a una cuidadora pegándole y gritándole que se quedara tranquilo para poder vestirlo. El enojo de ella fue evidente cuando le dije que saliera de la pieza y que la iba a acusar, diciendome: anda po! Tu crees que me van a hechar?!
Dicho y hecho. Fui a acusarla con RRHH quienes no se asombraron contestandome que no podían sacar a la cuidadora porque no tenían gente de reemplazo. No pude con eso, ese día renuncié.
Esto fue hace años, no se me ocurrió grabarla pues lo vi solo esa vez... me fui impotente y sin ninguna prueba para acusar al centro en otro lugar. Tenía 23 años... me cuestiono pues tampoco llamé a la tele por último.
No entiendo como, instituciones que debieran proteger a personas que nisiquiera pueden hablar para defenderse, prefieran tener su dotación completa antes de desvincular a maltratadores.
Esto sigue y seguirá pasando.