La ayuda llega de lejos!

Fui mamá hace poquito. Mientras yo estaba en la clínica llevaron a casa una chica para ayudarnos con el aseo. Ella es extranjera, cosa que para mi no es tema x que soy nieta de inmigrantes así que soy la primera en defenderlos. Hace súper bien su pega, es dedicada y meticulosa con el aseo, no es floja ni anda sacando la vuelta, cosa que nos pasó con varias chilenas con las que tratamos antes y no funcionaron.

El problema es que la tipa se mete y opina sobre mi crianza de forma muy impertinente. Soy primeriza así que escucho todos los concejos (hasta los malos que después ignoro), pero ella anda haciendo su trabajo y abre la puerta para decirme que el bebé está llorando porque lo estoy haciendo mal, que ella “parió 8 hijos así que sabe como se hace”.

Un día estaba sacándole los chanchitos y me quitó al bebé y me dijo que estaba haciéndolo mal, sin darme tiempo a reaccionar. Obviamente le pedí a mi guagua de vuelta y le dije que así me resultaba y conocía a mi hijo. Ahora le hago el quite y escucho sus concejos de forma respetuosa pero no los pesco. Me dijo que en la cuarentena no debía agacharme con la cola hacia las puertas o ventanas, o me podía "entrar aire", plop.

En fin, me da lata que se meta y aconseje tonteras, pero hace tan bien su trabajo, es responsable y eficiente, cosa que no hemos conseguido con ninguna chilena lamentablemente.