Ese hombre soy yo

Una vez leí una confesión de una mujer casada que engaño al marido con un compañero de trabajo también casado, había muchas críticas a ella, muchas ofensas y me vi en la obligación de confesar que ese hombre soy yo, apenas leí la historia supe que era ella, o puede ser otra persona: lo escribo ahora porque en ese momento tenía muchos problemas con mi señora, ella es tan celosa que me inventa cosas, me llamaba todo el tiempo, calculaba la hora desde que salía de la pega hasta que llegaba a la casa, era tan estresante que terminamos separándonos. Lo que tuve con esta compañera fue muy diferente, ella me daba paz, tranquilidad, se preocupaba por mí, me cuidaba y me hacía sentir bien, no como en mi casa.

Lo nuestro nadie lo supo, nunca tuvimos testigos, ella es una mujer maravillosa, y aunque nunca se quejó de nada, era muy solitaria, el marido se llevaba saliendo con los amigos los fines de semana y nunca le dedicaba tiempo a ella ni a sus hijos, aun así, según lo que ella contaba, no era malo, les tenia de todo en la casa, buenos autos, buena ropa y nunca les faltaba nada, pero él nunca estaba con ella ni los niños. Creo que de no haber sido por eso ella nunca habría estado conmigo, al parecer necesitaba que le dieran amor, no cosas materiales. Yo por mi parte, necesitaba algo distinto, mi esposa me tenía aburrido con sus celos, en mi trabajo todos se daban cuenta y aun así no la deje, (hasta hace un tiempo, pero fue por ese motivo, no por mi compañera).

A esta compañera la despidieron, junto con muchas personas más, después de eso solo nos vimos algunas veces porque ya no podíamos inventar horas extras, ella ya no trabajaba, es lógico.

Ahí murió todo, a veces me dan ganas de llamarla y buscarla pero tengo entendido que tuvo otro hijo en este tiempo, que la relación con el marido ha mejorado, que él les dedica más tiempo y al parecer ya no se acuerda de mí, nunca me habla, no me llama, y todas las noches me quedo como weon esperando que me hable a escondidas pero no lo hace.

Tal vez debería perder las esperanzas con ella pero aunque trato no puedo, ella es lo mejor que me ha pasado en la vida, y al igual como me dijo ella una vez, no me arrepiento de nada, ni siquiera de separarme porque al fin me siento libre, nadie me webea por nada y puedo respirar en paz.