Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

Somos seres humanos!

Soy profesional de TI. Me considero bueno en lo hago y trabaje algunos años en una importante empresa de retail a cargo de proyectos y servicios. Como jefe de area, tenia que trabajar con varios proveedores del rubro. Algunos bastante buenos y otros no tan buenos. Generalmente, cuando un proveedor no era muy bueno, yo lo presionaba y le exigia bastante. Claro, como yo representaba a una empresa gigantesca que todos los proveedores se peleaban, yo tenia el poder casi absoluto sobre ellos. Reconozco que abuse de mi posicin de 'niña bonita' algunas veces, incluso ridiculizando a algunos account manager que, para mi estandar, eran incompetentes.
Pasaron los años y me ocurrio lo que generalmente le pasa a varios profesionales de mi area, pero que trabajan para empresas no-informaticas: llegué a un tope donde la unica manera de seguir subiendo en la escala corporativa era esperando a que mi jefe directo, el gerente, se fuera. Obviamente para que eso sucediera tendrian que pasar muchos años, ytambien, de milagro, mi apellido español tendria que de alguna forma transformarse en aleman, italiano, o algo que suene como de gerente. Y a eso añadirle que mi titulo es de un instituto clase media nomas. No estudie en la PUC o en la Chile. Cuento corto: me cambié a una empresa de informática como jefe de proyectos. Mejor sueldo, mas futuro.

Sin embargo, ahora el proveedor era yo, y mi primer proyecto fue con un cliente grande, una 'niña bonita'. Yo me sentía seguro ya que conozco ese tipo de cliente. No obstante, a pesar de mis esfuerzos como gerente de servicio, el cliente no estaba conforme y se esforzaba diariamente por hacerme sentir a mí y a mi equipo de trabajo lo inútiles que eramos, lo 'incompetentes que eramos'. Me basureaban. Me daban ganas de decirle 'yo trabajé en empresas mas importantes que esta y con proyectos mas grandes' y me aguantaba. Pero luego a un par de años el odio hacia mi cliente, la depresión y el desanimo terminaron por pasarme la cuenta psicológica. Me di cuenta de que se me devolvió todo lo que había hecho y ahora sufrí en carne propia lo que es estar al otro lado de la moneda.

La moraleja de la historia es: quienes estén en empresas importantes (mandos medios o cargos altos) y traten con proveedores, por favor sean amables con ellos y colaborenles. Incluso si las cosas no marchan bien, somos humanos antes que profesionales. Nunca sabrán las vueltas que esta vida laboral tiene.



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.