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La rata de mi compañero

Muy buenas –sea cual sea la hora a la que están leyendo esto. Estudié contabilidad en un colegio técnico profesional y estoy haciendo mi práctica profesional en una tienda retail de mi ciudad. Trabajo principalmente atendiendo público: clientes que pierden la boleta y quieren una copia, que compran por internet con retiro en tienda, clientes enojados a quienes no les aplicaron el descuento de $100 y más. El motivo de esta confesión es que mi compañero de trabajo es una víbora con todas sus letras.

Esta historia comenzó el 22 de diciembre. Me contó que fumaba marihuana y que iba a venir la polola a verlo y que a la mina le molestaba caleta que él fumara. Me pidió que me quedara piola y obviamente así lo hice xd no me gusta compartir mucho con mis compañeros por el mismo motivo: son unas ratas.

La cosa es que, como me había confiado eso, pensé que a lo mejor quería hacerse mi amigo y empece a considerar invitarlo a tomarnos unas chelas y fumarnos un cigarro, en buena onda. Le pregunté si fumaba cigarros y me dijo que si, así que la hora de colación salimos a fumarnos un cigarro. Empezamos a hablar y cometí el error de hablarle de los puntos ciegos que había notado en la distribución de las cámaras.

Al otro día me llama mi jefe a la oficina y me dice que faltaba un producto retiro en tienda y que si yo había tenido algo que ver. Le pregunté si había algo que lo llevara a pensar que yo tuve algo que ver. Me dice que 'alguien' le contó que yo podía haberlo sacado y que no podía dudar de sus empleados que llevaban años trabajando. Le golpeé la mesa y le dije que iba a ir a la inspección del trabajo a relatar lo que había sucedido: que estaba siendo acusado injustamente. Me respondió que sabían que yo había estado buscando los puntos ciegos de las cámaras, y que estaba metido en problemas si no buscaba una forma de probar que soy inocente. Pedí los registros de las cámaras del día y me los enviaron al correo. Se puede ver claramente que en ningún momento llevo algo en la mano y que incluso, al salir de la tienda el guardia de seguridad me revisó el bolso (lo hacen con todos, es protocolo). El sentido común dicta que yo debía renunciar al día después, pero no lo hice porque necesito hacer todas las horas posibles ya que entro a la universidad a fines de febrero. Me movieron al otro mesón de atención al cliente y me dijeron que a la persona que había dado la información lo iban a amonestar formalmente.

Como es de esperarse, no tardé en empezar a idear forma para cagar a la rata de mi compañero. Le hundí los cubiertos en el agua del wáter y los oriné. Le eché unos pollos a su almuerzo cuando se descuidó. Y también le limé las llaves de la casa para que no pudiera entrar.

Mañana planeo tomarle la marihuana de la mochila y ponerla encima de su mesón cuando vaya a colación (si las aseadoras lo ven están obligadas a denunciar).

El muy hijo de puta va a tener que renunciar si cree que dejaré de hacerle la vida imposible.



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