Mirando desde fuera
Soy extranjero, joven y profesional. Llegue a este país hace un año con la intención de mejorar mi calidad de vida y la de mi familia.
Mi primer empleo fue como personal de aseo en el negocio de un caballero que me demostró que el esfuerzo y la constancia son las claves al éxito. Ganaba poco pero me esforzaba todos los días porque Dios me estaba mostrando que aun en otra tierra Él es fiel.
Luego de 4 meses conseguí trabajo en mi profesión en una consultora chica que me dio la oportunidad de aprender más a detalle mi profesión en este país pero el ambiente laboral y mi relación con el jefe no era la mejor. Sin embargo nunca me queje, siempre di mi mayor esfuerzo hasta pase a tener contrato indefinido y aumento de sueldo aunque aun creía que podía conseguir algo mejor.
Luego de 6 meses en esta consultora, tuve la dicha de tener dos ofertas de trabajo muy buenas y concretas (una era mi sueño desde que estudiaba en la universidad) al final decidí por la empresa que me otorgaba mayor estabilidad, un horario más piola (como dirían acá) y un salario mucho mas competitivo.
En conclusión, en un año he logrado profesional y personalmente logros que en mi país eran utopías. Agradezco a cada uno de los chilenos que he conocido aun cuando no sean mis compadres y les invito a que vean la mejor cara de las cosas pues no saben la dicha que tienen de vivir en esta tierra tan próspera.