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¿Madre ambivalente o arrepentida?

Soy casada y hace 4 meses nació mi pequeña.

Fue un embarazo que llegó de sorpresa, aún no quería ser madre, pero ocurrió... Aceptar el embarazo fue díficil, verme engordar y caminar con dificultad al final era frustrante, yo que siempre fui súper ágil.

Tenía mi trabajo, estaba esperando tener mis años reglamentarios para cambiarme a uno que me pagará mejor ( soy profesional pero me costó 2 años encontrar uno que me aceptara sin experiencia y por un sueldo de 500) con el tiempo luche por aumentos y me esforcé mucho, aún así, para mí rubro, gano poco (680).

Cuando supe que estabas embarazada me llamaron para nuevas empresas, pero por el embarazo perdí 4 oportunidades de cambiarme.
Me frustre y sufrí, este embarazo me cortó alas.
Pensé qué naciendo la pequeña podría sentirme mejor, sentiría ese amor infinito... Tampoco fue así.

Me siento pésimo, lloró y solo veo lo hundida que estoy, sin opciones, lo que gano se va en pagar y pagar deudas y ahora gastos con la pequeña.

Yo la quiero, pero no la amo... A diario pienso en cómo estaría hoy si ella no estuviera, me da susto esos pensamientos, creo que la vida me puede castigar por pensar así y si le pasa algo la culpa me va a matar.

No me alcanza para pagar un diplomado y seguir especializándome, me siento estancada, a eso, le sumo que la pequeña se roba todo el día, mis logros son hacer aseo, bañarme y cocinar ¿Cómo regresaré a mi rutina laboral? No me siento capaz.

No imaginé jamás mi maternidad así, quería que yo estuviese resuelta, en mejor posición profesional, mejor posición económica y mi vida más estable.

Hay tanto hacia atrás.

No solo soy responsable de mi pequeña. Sino que también de una madre depresiva bipolar con fase psicótica que no puedo dejar para vivir la vida que siempre soñé.

Vivo en casa de ella, por ende bajo sus reglas, a pesar que logramos con mi esposo comprar un departamento en otra región, no pudimos irnos y seguinos acá con ella. Es mi karma, es mi responsabilidad, no la puedo abandonar.

He vivido en la sombra y a las paradas de mi mamá toda mi vida, siempre haciendo de todo para que esté bien, mediando entre ella y mi esposo, para lograr tener una convivencia sana. Debo estar 3 pasos adelante de mi mamá para no tener problemas y estar atenta a las torpezas que le puedan molestar de mi esposo. Siempre en medio para evitar conflictos.

Ahora con la pequeña debo repartirme en 3 ... Pero ¿dónde quedó yo?

Me he postergado desde los 11 años, esperando la oportunidad para volar con mis alas y no rendir cuentas a ella y vivir mi vida, salir a trotar si quiero, o ir al gimnasio, comer hasta que me dé hipo o que mis amistades vengan a visitarme a mí, no qué ella esté ahí, supervisando como si yo fuera una niña de 6 años, que no juzgue lo qué hablo y como pienso.

Ahora son las críticas en cómo crío a la pequeña... Apenas puedo pasar el día tratando de equilibrar esta vida sin que ninguno se moleste y es tan tan agotador, siento que tengo 2 niños y 1 bebé.

Me siento hundida y sin salida... Mi mamá es mi karma... Siempre espere que cuando tuviera un hijo sería cuando mi mamá no estuviera en está tierra y yo viviría en un departamento con espacios determinados y míos, con un buen trabajo y siendo exitosa

Hoy solo veo al igual que la cuncuna amarilla que se subía a las copas de los árboles a mirar a los bichitos que pueden volar añorado ser uno de ellos... Miro las redes de mis colegas y amistades, cómo disfrutan si vida con y sin hijos, cómo pasean en los parques, cómo equilibran todo, viven con sus parejas, se independizan y yo, acá en casa de mamá, esperando el día que me pueda ir, el día que ella muera yo correré de está casa. Me van a criticar mucho, pero espero que no deba esperar 10 años más para que pase esto.

Tengo 32 años y lo único que he logrado hasta hoy son frustraciones y ser una mujer reprimida incapaz de decir un garabato delante de su mamá para evitar problemas.

Quiero ser yo, pero eso ya no es posible... Arruine mi vida de tantas formas qué no tengo salida.

Primero vivía por mi mamá, por su bienestar, luego por ella y mi esposo y ahora la pequeña... Aunque mi mamá se muera ya el tiempo pasó, y lo perdí siendo la mamá de mi mamá.

Estoy cansada, cansadas y agotada.

Me arrepiento de ser madre, me arrepiento de ser hija, me arrepiento de intentar ser perfecta. La hija ejemplar que cuida de su mamá.

Quiero crecer pero ya es tarde, todas las responsabilidades llegaron y ya lo hay más que hacer.

Hasta e pensado en suicidarme... Así mi esposo se haría cargo de la hija (A ella le gusta más estar junto a él que conmigo), mi hermana no le quedará otra que hacerse cargo de mi mamá y yo... Yo por fin podría estar en libertad.



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