Buenos y malos
Solo agradezco no haber pasado por ninguna de las terribles historias de humillación que pasaron algun@s en su escuelas por parte de sus profesores.
De haber corrido con esa mala suerte no sería hoy profe... lo cual es lo más maravilloso que puede haber!
Abrazo a todas esas personas dañadas y sepan que desatinados y malas personas hay en toda profesión...