Karma police

Esta historia me la contó mi tata porque el no cacha na’ de tecnología y creo que es una buena historia; y ya que no tengo mucho que hacer, se los cuento:

Mi tata es conserje y con todo esto de la pandemia le ofrecieron quedarse en uno de los departamentos para que pudiera seguir haciendo la pega.

Él quería, nosotros no somos muuuuuuy cercanos y su pega es su vida porque mi abuela murió hace años... así que junto con otro viejo (como de la misma edad) se quedaron en el depto que les dejaron.

Se intercalaban las noches y una mañana Juan (así le vamos a colocar al compañero de mi tata) no llegó a en su horario. Mi tata subió a buscarlo y le gritó desde la puerta: ¡Oye Juan, ya po’ apura!

El viejo no se movió y cuando finalmente lo fue a ver... estaba helado. Se murió en el sueño, con cara de no haber sufrido nada. Después del velorio, entierro y todas esas cosas que siguen a la muerte de una persona) mi tata siguió trabajando como siempre.

Nunca se le pasó por la cabeza que le iba a pasar... casi todos los días en que ellos no tenían pega y estaban aburridos se ponían a jugar carioca y Juan - que ya jugaba también sus numeritos en el kino - tenía una deuda considerable acumulada con mi tata y siempre le decía (como los lannister) ‘yo siempre pago mis deudas’

Mi abuelo siguió viviendo en el depto, pese a que el otro viejo se murió allí. Y entre las cosas que estaban tiradas, encontró los números que jugaba al kino. Fue al local de la esquina y se compró el juego más barato. Y adivinen!!!... 60mil pesos se ganó jajajajaj y el viejo QEPD devolvió exactamente la plata de debía.