Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

La puerta

La verdad esto tenía ganas de escribirlo hace mucho tiempo, no lo había hecho por falta de tiempo, lo cual para ustedes es señal de que será largo, pero dependiendo de lo que algunos estén pasando, valdrá la pena leer todo.

El año pasado, lo comencé de una super buena forma, después de haber pasado por hartos trabajos de poca duración, de esos que tomas porque no hay nada más, al fin había encontrado un buen puesto en una transaccional dedicada a los seguros de vida e inversión.

Mis primeros meses fueron geniales, logré romper una que otra marca en ventas, y parecía tener un futuro ahí. Mis jefes me tenían buena, me tenían de regalón y me daban la confianza para poder hacer cosas que tal vez otros necesitaban más experiencia para estar listos, mi aprendizaje era super rápido y eso me tenía más que feliz, pero cometí un error. En un movimiento arriesgado, hice un negocio muy grande con solo un cliente, y este al poco tiempo dejó de pagar la cuota mensual de su inversion, sus pólizas, y en resumidas cuentas, arruinó en sobre manera mi historial de negocios. Si, se podrán imaginar, me despidieron.

Pase 2 meses horribles, luego de casi un año de un bienestar económico, con 3 hijos que mantener, una esposa muy cansada, (que en su limitado tiempo y energía trataba con todas sus fuerzas de apoyarme), y un arriendo que pagar, quedé cesante y sin una oferta laboral. 2 años buscando por todos lados, ofreciéndome en empresas de aseo, en ventas, maestranzas, constructoras, etc. Menciono estos rubros sin ánimo alguno de desmerecerlos, lo hago para explicar el abanico de rubros en los cuales trate de encontrar algo, para comer, para vivir. Intente suicidarme 2 veces, parado a las 7 de la mañana en la línea del tren, esperando a que pasara y se acabará mi miseria. Le había fallado a mis hijos, a mi esposa. Si no era un buen padre, no era nada. Si no era buen esposo, no era nada. Esas frases me atormentaban todas las noches. Igual cuando el tren ya estaba por alcanzarme, y tocaba su bocina para hacer que me retirara de su trayecto, algo me impulsaba a salir, a saltar, a correr y no morir. Instinto de supervivencia supongo.

Sin ánimos de dar la lata, se abrió de la nada una pequeña puerta, en una maestranza de gran prestigio a nivel nacional e internacional, pese a que el lugar era de renombre, la puerta era pequeña porque no era mi rubro, no tenía experiencia ni conocimientos ni nada, entonces mi puesto era simple, ayudar en lo que sea, y hacer lo que me pidan.

Llevo casi un año aquí, contratado de forma indefinida, escale de ayudante a maestro, de maestro a operador. Todo esto en un periodo corto, porque he intentado aprender lo que no sabía antes, y a puro empuje, lo he ido logrando. Mi sueldo es bueno, estamos iniciando los tramites para comprar nuestra casa, y estoy vivo.

Si llegaron hasta acá leyendo, quiero decirles esto para terminar. No bajen los brazos, no se rindan, no mueran (de ninguna forma posible, ni literal, ni figurativamente). Más temprano que tarde sale el sol, la vida está llena de oportunidades, algunas demoran más que otras, lo que importa es estar siempre listo para tomarla y no soltarla. Un abrazo a quienes lo estan pasando mal, pero si yo pude, cambiando de rubro, no tiendo experiencia, ni conocimientos, ni aptitudes, cualquiera puede. Ánimo!



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.