Perezosos

Nunca me imaginé que la cosa se iba a poner tan mala. A pesar de los riesgos, ya que había acostumbrado al estallido social, a quedarme trabajando a pesar de que podían cerrar el metro y demás. Ahora con este coronavirus, por más que quisiera vender desde mi lugar de trabajo ya debo hacerlo desde mi casa para cuidar de mi y de la gente que me rodea.

Trabajo en ventas, gracias a Dios aún con mi trabajo muy a pesar de los despidos que me ha tocado ver. Realmente me da lata ver partir compañeros trabajadores y que llevaban su buen tiempo en la empresa.

En lo personal me considero bueno en lo que hago y no le hago el quite a la pega, pero como he visto gente a la que estimo irse, me encabrona profundamente saber que la empresa no ha sabido detectar a ciertas personas que van a trabajar sólo para cumplir horario (a veces ni eso porque se largan al medio día), que se la pasan jugando nintendo, que no coopera, que no contesta el teléfono de empresa a ningún cliente, mejor dicho gente floja que sé que le quita la oportunidad a un cesante que sea bueno pa la pega.

No sé cuánto tiempo me quede en este trabajo, pero a ratos me dan unas ganas de ponerme sapo y delatar a todos estos holgazanes. Tengo rabia de lo injusta que es la vida a veces.

Ojalá, si me despiden, que sea después que a estos perezosos.

Ya me desahogué. Cuídense mucho...