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Contra todo!

Confieso que mi mamá, después de muchos años de trabajar en empresas de alimentación ha sido notificada con una carta de despido.

Jamás tuvo ningún problema con las decenas de jefes que han pasado por las distintas empresas que se adjudican una concesión. Quizás tuvo atados con algunas compañeras, pero jamás fueron tan graves, lo típico de la mayoría de trabajos, malos entendidos, envidias, espinitas y todo eso, nada grave como para merecer un despido.

Hace un par de años llegó a su lugar de trabajo una mujer que siempre fue muy conflictiva, que llevaba mas de 8 años de antigüedad y que jamás aprendió a preparar un almuerzo, que todo esperaba que lo hagan sus colegas, que no encontraban un lugar donde dejarla para no despedirla, porque su familia es un caso social, por decirlo asi... Siempre fue un cacho para la empresa.

Este año apareció un tipo de supervisor, que de buenas a primeras arremetió sin causas aparentes contra mi mamá, altanero, prepotente y con aires de grandeza, siendo que esta era la primera vez que ejercía su cargo, no tenía experiencia en el área. Tampoco tenía motivos del porqué de su actitud contra mi mamá, siendo que ella parecía hacer bien su trabajo, siempre apegándose a las indicaciones, sin llegar a caer en ser chupamedias.

Tiempo después se supo, que la mujer que habia llegado hace poco era quien metía cizaña entre el jefe y mi mamá. Aclararon sus malentendidos y todo fue como debió haber sido desde un principio, o eso intentaba dejar ver el nuevo supervisor.

Hoy le llega la carta de notificación de despido a mi mamá y a la otra mujer, según decía por temas de higiene, cosa bastante extraña, ya que todos en el lugar realizan los mismos procedimientos a diario y como corresponde al protocolo, lo que no se explica que sólo a ellas 2 les haya llegado la carta.

Señor supervisor, entienda usted que mi mamá es una persona enferma y a punto de jubilar. Entienda usted que ya no podrá encontrar una nueva fuente laboral. Entienda usted que lo que hizo fue un daño innecesario. Entienda usted que trabaja con personas que realmente necesitan el sueldo, que no van a pasarla bien, a tomar cafecito, comer y robar, que están todo tiempo tratando con el estigma que muchas personas les han dado y que no todas practican los malos hábitos de robar cosas para vender y hacerse las américas a costa de su trabajo.

Mi mamá siempre fue una mujer trabajadora y que supo salir adelante a pesar de las adversidades, pero cuando te acercas a la terrible tercera edad, no hay mucho qué hacer.

Que sepa usted, que ella no está sola y cuenta con una familia que la apoyará en todo lo que sea necesario, si sus intenciones fue hacerla caer hasta el fondo, no lo ha conseguido, el cáncer no pudo con ella, usted mucho menos podrá.



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