Reestablecer contraseña

La dirección de correo electrónico está asociada a tu cuenta.

¿Por qué registarse?

Full Confession Control

Actualizar / eliminar o editar tus confesiones.

Notificaciones

Suscríbase para recibir notificaciones por email con las respuestas a tus confesiones.

Publicidad

¿Quieres publicitarte con nosotros? Comienza creando una cuenta.

¿Tienes alguna confesión laboral?

El nombre es opcional o puedes poner un seudónimo si lo deseas.

Me cuesta relacionarme.

Me encuentro atrapada en una rutina que cada día se vuelve más difícil de soportar. Mi trabajo es monótono, y aunque cumplo con mis tareas, siento que cada día pesa más. He tenido algunos problemas con el equipo; No soy buena relacionándome y, últimamente, parece que ni siquiera me importa disimular mi frustración. Sé que mi tono es áspero y que no les caigo bien.

La soledad me pesa. No tengo amigos, ni siquiera una red de apoyo a la que pueda acudir en los días que siento que todo se viene abajo. Mi problema visual no ayuda, ya veces me hace sentir aún más aislado del resto, más incomprendida, como si no pudiera ver el esfuerzo que pongo solo en vivir el día a día.


Y aquí estoy, sintiéndome atrapada, enojada conmigo misma y con mi entorno. Mi jefe está conforme con mi trabajo, pero llegaron dos quejas formales por la “Ley Karin” y no sé cómo manejarlo. Sé que mi actitud está alejando a las personas y que no soy la mejor para comunicarme, pero la verdad es que me siento perdida. La vida se ha vuelto un peso que no sé cómo llevar, y aunque sigo adelante, no estoy segura de por qué lo hago.

A veces me pregunto si hay algo más allá de esta frustración y esta soledad. Pero luego pienso que tal vez esto es todo lo que hay y que no tiene caso esperar algo.



No te reprimas. Completamente anónimo.

Suscríbete a nuestra lista de correo.

Ingresa tu email y te mandaremos las últimas confesiones
Nosotros valoramos tu privacidad, nunca compartiremos tu correo con nadie.