Le paso a un amigo.. ( yaaa...)
Les vengo a contar una historia que no es mía, es de hace unos años de un amigo:
Pasa que José, vivía feliz de la vida y descubrió Tinder, ahí conoció varias muchachas con las que lo pasó bien, una de ellas por una u otra razón se vieron muy poco aunque según ellos mismos se querían ver bastante más, mi compadre nunca estudió y la amiga era, según ella misma comentaba profesora de un instituto x del sector oriente, pasaron un par de años y mi compadre se empoto con cierta muchacha del norte, se fue para el norte unos par de años y volvió con cria y sin muchacha.
Juntó unas Lucas unos 10% y se puso a estudiar, grande fue la sorpresa cuando en su primera semana se dió cuenta que quien le enseñaría los trucos de la administración sería la amiga de Tinder, contento y cauto para hacer el primer movimiento, esperó una semana para encontrarse con la pedagoga en un pasillo, cuando para su tamaña sopresa un anillo salvaje apareció, pensó en huir, pero con las botas puestas, erguido se mantuvo, todo bien por aquí todo bien por allá, y así pasaron días, las semanas y un par de meses.
Cuando el coloquio se fue relajando, José vio la coqueta mirada, el instinto los llamaba, 2 semestres dudaría el combate, dónde mi compadre (extrañamente) salió con sobresaliente, ella no podía seguir, no dió razones claras, pero ya no seguiría con la tertulia, un semestre pasó y el cumpleaños de mi compadre se acercaba, y entre tanto José y las mujeres... naca la pirinaca... Tres "amigos" se juntaron y un regalo le consiguieron una scort de primera al cumpleaños de sorpresa llegaría, prepararon la pieza y mi compadre no sabía (yo tampoco) cuando se acerca la hora me comentan la idea, mala dije, mala idea pensé de inmediato, que ya la habían probado que era buena decían estos cabros, sinceramente pensé que mi compadre se enojaría o no aceptaría estar con la acompañante pero al parecer mala idea no le pareció.
Hasta se entusiasmó, la mujer llamó que ya había llegado, así que José a la pieza, a esperar su regalo se fué, llamaron a la puerta una voz extrañamente familiar se me hacía, justo en ese momento una copa de cayó y fui a recoger y limpiar, en eso la señorita entro saludó y a la habitación entró...
